Revista de Medicina de la Isla de la Juventud
Volumen 17, No 1 (2016).
ISSN: 1726 6696
Artículo Original
Comportamiento de la sexualidad en gerontes de la Universidad del Adulto Mayor. Isla de la Juventud. Octubre 2015-marzo 2016
Behavior of sexuality in gerontes of the University of the Elderly. Isle of Youth. October 2015-March 2016
Lic. Alejandrina Almira Bressler1, Lic. Miroidis González Balar2, Lic. Loraine Ferrás Rojas3, Lic. Pedro López López4
1 Especialista en Enfermería Comunitaria. Master en Longevidad Satisfactoria. Profesora Auxiliar
2 Master en Longevidad Satisfactoria. Profesora Asistente
3 Master en Longevidad Satisfactoria. Profesora Asistente
4 Especialista en Enfermería Comunitaria.Profesor Asistente
RESUMEN
Se realiza un estudio descriptivo ambispectivo a los gerontes matriculados en la Universidad del Adulto Mayor en Nueva Gerona, Municipio Especial de la Isla de la Juventud, con el objetivo de caracterizar el comportamiento de la sexualidad en este grupo poblacional, en el período de octubre 2015 a marzo del 2016. El universo estuvo conformado por 15 ancianos con 60 años y más, lo que constituyó el cien por ciento de la muestra. La recolección de la información se obtuvo mediante encuesta aplicada por los autores a la totalidad del universo. El grupo etario que predominó fue el de 65-69 años, para un 46,6%, le siguen los casados, (33.3 %), con igual por ciento los que mantenían privacidad dentro de su núcleo familiar y el 60 % opinó que las relaciones sexuales son placenteras. Los resultados se expresan en tablas para su mejor comprensión.
Palabras clave: gerontes, adulto mayor, sexualidad
SUMMARY
A descriptive, ambispective study was carried out on the gerontologists enrolled at the University of the Elderly in Nueva Gerona, Special Municipality of the Isle of Youth, with the aim of characterizing the behavior of sexuality in this population group, in the period of October 2015 To March 2016.The universe was composed of 15 elderly aged 60 and over, marking one hundred percent of the sample. The collection of information was obtained by survey conducted by the authors to the whole universe. The predominant age group 65-69 years is 46.6%, married to 33.3%, the same percent kept privacy within their household and 60% thought that sex is pleasurable.The results are shown in tables for better understanding.
Keywords: geronts, sexuality, elder person
INTRODUCCIÓN
Las primeras consideraciones sobre la sexualidad datan desde casi cinco mil años; tan solo se dispone de datos muy limitados sobre la descripción de las conductas sexuales de diversos pueblos con anterioridad al año 1000 a.n.e. No es hasta el siglo XX que se empieza a investigar la sexualidad desde el punto de vista científico. Algunos autores comenzaron a ofrecer una visión científica como Sigmud Freud, sus publicaciones han dado lugar a una corriente del pensamiento, el psicoanálisis, que permanece vivo y se ha multiplicado en diferentes teorías y posiciones y que ha impregnado toda la cultura del Siglo XX.1
La sexualidad desempeña un papel muy importante a lo largo de la vida, no hay motivo alguno para creer que con la edad desaparecen el interés o las prácticas sexuales; el placer no solo depende del aparato genital, sino también de toda una serie de excitaciones y actividades que se realizan desde la infancia, las cuales producen un placer que no puede reducirse a la satisfacción de una necesidad fisiológica fundamental y que se denomina como “normal” en el amor sexual. Por lo general, la sociedad relaciona más a la sexualidad con la juventud, alimentando muchos estereotipos negativos acerca de la sexualidad en la vejez.2
El comportamiento sexual en los seres humanos se viene estudiando desde los años cuarenta, gracias a un entomólogo y psicólogo norteamericano llamado Alfred Charles Kinsey, quien dirigió para la fundación Rockefeller un proyecto de estudio acerca del comportamiento sexual humano, publicando varios volúmenes entre ellos “Sexual behaviour in the human male” (1948), y “Sexual behaviour in the human female” (1953). Estos volúmenes acerca del comportamiento sexual en los seres humanos son muy criticados, pero dejan un precedente acerca del comportamiento sexual en todos los seres humanos con capítulos especiales en la población mayor.3
La sexualidad humana es un fenómeno sociocultural que está influido por la calidad de las relaciones interpersonales, el contexto en que nos desenvolvemos, y por la integración que hemos hecho de las experiencias vividas. Tanto las normas de comportamiento sexual, como los roles sexuales están construidos socialmente. Históricamente metas y comportamientos sexuales han ido variando.2
El término sexualidad incluye la comunicación, la afectividad, la reproducción y el placer; es la expresión de los sentimientos y valores tanto espirituales como humanos. La manifestación de lo masculino y lo femenino, los roles y las relaciones de pareja se expresan en las formas, estilos propios de cada individuo y la etapa de la vida en la que se encuentra; conocerla, vivirla libre y responsablemente es saludable y necesario para el equilibrio personal. De hecho, convertir la sexualidad en un tabú no se debe a las características propias de la vida sexual, sino que está condicionada históricamente por la valoración que le da la sociedad en cada época. Los profundos cambios iniciados en Cuba a partir de 1959 crearon condiciones objetivas y subjetivas favorables para la preparación de la población respecto al amor, el matrimonio, la vida en pareja y la familia, por lo que la educación sexual no debe limitarse a niños y jóvenes.4
Al abordar la temática de la sexualidad en la tercera edad, se le hace frente a un doble inconveniente; ahondar en las particularidades de la vejez, lo cual suele resultar una tarea agobiante, no solo por la falta de información y datos investigados al respecto, sino también porque la problemática de esta etapa es generalmente abordada desde su carácter negativo, sin valorar ni considerar las ganancias y riquezas que alcanza la misma.
Es imprescindible lograr una aceptación franca por parte de los adultos y de generaciones con mayor madurez, función en la cual se destaca el arduo trabajo realizado por los especialistas de la Universidad del Adulto Mayor en coordinación con los equipos multidisciplinarios de atención geriátrica.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) resalta que más del 22 % de los adultos mayores en el mundo, presentan problemas con la sexualidad, donde los prejuicios, la idiosincrasia y la cultura forman parte indisoluble de ella.5
El estudio acerca de los temas relacionados con la sexualidad se inicia en Cuba por iniciativa de la Federación de Mujeres Cubanas (FMC), aproximadamente en los años 60, aun sin referirse a la sexualidad en el adulto mayor.
Posteriormente en debates realizados en los congresos de la FMC en los años 1971 y 1974 y en el primer congreso del Partido Comunista de Cuba (PCC) en 1975, se acordó la creación del Grupo Nacional de Educación Sexual, hoy Centro Nacional de Educación Sexual (CENESEX), el cual tiene un papel fundamental en el desarrollo de la educación sexual y la sexología en Cuba, aunque en sus inicios se dedicó fundamentalmente al trabajo de planificación familiar y a lo relacionado con las enfermedades de transmisión sexual (ETS). En 1980 se crea el grupo multidisciplinario de sexología del Hospital Militar “Carlos J. Finlay”, fue el primer equipo para el tratamiento de la sexualidad que puso en práctica la psicoterapia educativa sexual en grupos, como parte rutinaria del tratamiento y con la atención al adulto mayor con disfunciones sexuales. Esto se realiza en un momento en que prácticamente predominaba el criterio de exclusión a personas mayores de 60 años. El doctor Emilio del Corral en los años 80 encabeza un colectivo de trabajo que realizó intervenciones educativas a grupos de ancianas y ancianos con sus familias, siendo este el primer antecedente que se conoce que utilizó conceptos pedagógicos grupales de educación sexual para ancianos. En 1995, es registrado por el Dr. Oscar Díaz Noriega y otros un estudio en una población mayor de 65 años, donde se refieren algunos aspectos psicosociales en ancianos y ancianas, de gran importancia.6
Es de señalar que gracias al desarrollo en general de la sociedad y en particular de la medicina, el promedio de vida y la calidad de la misma continúan su incremento de forma sistemática. En el 2009, las personas de 60 años y más conformaban el 17,4 % del total de la población y la edad media de la población cubana ascendía a 38,10 años, lo que ubica al país entre los más envejecidos de América Latina y el Caribe. Se estima que para el 2025, la población cubana debe alcanzar los 11 134 685 habitantes y liderará la región con el 26,1 % de su población conformada por adultos mayores.7, 8
Por ser el adulto mayor uno de los programas priorizados por la Revolución y ser la sexualidad un derecho de todos los humanos y en esta etapa de la vida haber estado siempre atada a tabúes, incomprensión familiar y falsos conceptos, nos vemos motivados a investigar el comportamiento de la sexualidad en los ancianos incorporados a la Universidad del Adulto Mayor del Municipio Especial Isla de la Juventud.
OBJETIVOS
General
Caracterizar el comportamiento de la sexualidad de los gerontes matriculados en la Universidad del Adulto Mayor en la Isla de la Juventud de octubre 2015 a marzo del 2016.
Específicos
- Caracterizar el universo en estudio según variables sociodemográficas
- Determinar la privacidad con que cuentan para realizar las relaciones sexuales y su frecuencia.
- Identificar las opiniones de los ancianos acerca de las prácticas sexuales
MATERIAL Y MÉTODO
Se realizó un estudio descriptivo ambispectivo a los gerontes matriculados en la Universidad del Adulto Mayor en Nueva Gerona, Municipio Especial Isla de la Juventud, durante el periodo comprendido entre octubre de 2015 a marzo de 2016.
El universo estuvo conformado por los 15 ancianos de 60 años en adelante matriculados en la universidad, lo que constituyó el cien por ciento de la muestra.
Se le aplicó, por parte de los autores, una encuesta a cada uno de ellos con el objetivo de recolectar la información deseada, se les explicó la finalidad de la misma y se les pidió su más sincera colaboración.
Las variables que se tuvieron en cuenta para la realización de la encuesta fueron: estado civil, privacidad, relaciones sexuales, frecuencia de la actividad sexual y opiniones de los ancianos sobre las prácticas sexuales.
Para el procesamiento y análisis de los datos se realizó el cálculo de porcentajes. Los resultados se presentan en tablas y gráficos.
La redacción del informe final se realizó mediante el procesador de texto Word para Windows XP y para la confección de los gráficos y tablas se utilizó Microsoft Excel 2007.
RESULTADOS
Tabla No. 1. Distribución de los ancianos según edad y sexo. Universidad del Adulto Mayor. Isla de la Juventud. Octubre 2015 - Marzo 2016
Fuente: encuesta
Como puede apreciarse en la Tabla No. 1, predominó el grupo etario de 65-69 años representado por el 46.66 % de la muestra y el sexo femenino con un 73.34 %.Tabla No. 2. Estado civil y sexo. Universidad del Adulto Mayor. Isla de la Juventud. Octubre 2015 - Marzo 2016
Fuente: encuesta
Respecto a los adultos mayores según estado civil y sexo (Tabla No. 2), se encontró una mayoría de los casados con 9 para un 60.00 %. Al evaluar a los divorciados predominó el sexo femenino para un 20.00 % seguido de las parejas estables en igual sexo y por ciento. En la muestra en estudio no se encontraron solteros, ni viudos.
Tabla No. 3. Relaciones sexuales y privacidad. Universidad del Adulto Mayor. Isla de la Juventud. Octubre 2015-Marzo 2016
Fuente: encuesta
La Tabla No. 3 muestra que 12 adultos mayores (80.00 %) tenían privacidad para la realización de sus prácticas sexuales
Tabla No. 4. Frecuencia de las prácticas sexuales de los adultos mayores. Universidad del Adulto Mayor. Isla de la Juventud. Octubre 2015-Marzo 2016
Fuente: encuesta
La Tabla No. 4 muestra que la frecuencia quincenal (60 %) fue la que predominó seguida por la semanal y la ocasional, ambas con el 20 %.
Tabla No. 5. Opiniones de los adultos mayores sobre la práctica de relaciones sexuales. Universidad del Adulto Mayor. Isla de la Juventud. Octubre 2015-Marzo 2016
Fuente: encuesta
En la Tabla No. 5 se evidencia que el 40.00 % de las féminas opina que las relaciones sexuales deben cesar a medida que avanza la edad, aunque el 60.00 % considera que estas son placenteras.
DISCUSIÓN
Numerosos estudios reportan acerca de que en la tercera edad se mantiene actividad sexual en un porcentaje elevado de personas, y que se mantiene vivo el interés por el sexo, todo lo cual nos hace pensar que la sexualidad en esta etapa de la vida no es un mito. Resultados similares en cuanto al grupo de edades, fueron encontrados en el estudio realizado en Santiago de Cuba a los gerontes matriculados en la universidad del adulto mayor.4
En la bibliografía revisada se plantea que la actividad sexual en la edad avanzada es natural y fisiológica y que, por tanto, la misma no debe desaparecer. Algunos autores consideran que la declinación de la función sexual es más atribuible al propio envejecimiento o “la edad”, que a cualquier otra condición, y que es por ello que en todas las investigaciones epidemiológicas sobre la disfunción sexual aparece el envejecimiento como el primer factor de riesgo.9
Los casados de ambos sexos mantenían relaciones sexuales activas. Es importante aclarar lo difícil que resulta en esta etapa de la vida, encontrar un compañero, debido a las características particulares de este grupo etario donde predominan otros intereses. Por otra parte, en el análisis sobre la práctica de las relaciones sexuales activas según sexo se encontró, que en sentido general, la actividad sexual en esta etapa de la vida depende, en gran medida, de la existencia de un compañero, y de las creencias sociales arraigadas en las personas desde su juventud. Asimismo, coinciden con otros investigadores, los cuales destacan la importancia de que la tercera edad no es sinónimo de incapacidad sexual, que la energía no desaparece con la edad, solo cambia la intensidad de su respuesta y sigue siendo placentera.4-10
La mayoría de los ancianos mantenían privacidad para realizar las relaciones sexuales, lo que difiere de otros estudios donde se plantea que la mayoría de los ancianos conviven con sus familias pues en la sociedad cubana actual es muy común que coincidan tres generaciones habitando la misma casa y generalmente los ancianos tienen que compartir su habitación con otras personas por el falso concepto de pensar que ellos no necesitan privacidad.5
Otro estudio indica que el 67.7 % de la muestra no tenían una privacidad adecuada para llevar a cabo su vida sexual de manera satisfactoria. En tales situaciones están poniendo al anciano en ambientes difíciles, es a esa edad donde mayores problemas de adaptación aparecen y se requiere de ajustes en todas las esferas para asimilar un nuevo cambio, así como también independientemente de la edad, la profundidad de las relaciones o el deseo sexual que se experimente, se necesita ante todo privacidad para las mismas. Este problema se agudiza cuando en una casa viven disímiles generaciones y no existe conocimiento del tema.11
A consideración de los autores este aspecto puede revertirse con la educación sexual bien estructurada a toda la población que permita comprender que la sexualidad cobra igual importancia para todos los grupos etarios. El resultado obtenido en opinión de los autores puede deberse a la muestra que es muy pequeña, y a que el fondo habitacional de la Isla de la Juventud está compuesto en su inmensa mayoría por viviendas de pequeño formato, dígase apartamentos, que no se corresponden con la estructura familiar en cuanto al número de miembros.
Las frecuencias de relaciones sexuales que predominaron fueron las quincenales, dato que coincide con autores internacionales. El psicólogo Baile Ayensa en España, refleja en su trabajo que el 20,3 % de los ancianos realizaban actividad sexual una vez por semana y Silva en Bogotá plantea que el 50,0 % tenían relaciones sexuales regulares, con la diferencia de que el deseo sexual era menor en mujeres que en hombres.7
Otros autores plantean que la actividad sexual disminuye con la edad, manteniéndose con una frecuencia variable, dependiendo de las características de la población estudiada. Cabe destacar que la gran mayoría de los estudios demuestran claramente que la frecuencia de las relaciones sexuales disminuye con la edad y que el mantenimiento de la actividad sexual en los ancianos depende principalmente del buen estado de salud físico y mental, la existencia de un compañero/a sin limitaciones y la historia sexual previa.12
Muchas veces se tienen relaciones sexuales sin deseos y esto deteriora gradualmente los sentimientos. La pareja debe buscar sus espacios, ser creativa en la vida cotidiana, debe estar preparada para enfrentar los pequeños y grandes problemas que surjan cada día y no los lleve a la separación.1-13
Las opiniones de los adultos mayores acerca de la sexualidad son diversas. El mayor por ciento plantea que las relaciones sexuales en esta etapa de la vida son innecesarias, que deben cesar al avanzar la edad, que son por gusto, pues no causan placer y pueden ser dañinas para la salud y hasta han referido que resultan ridículas. En el presente estudio, la mayoría si las encuentra placenteras. Un estudio realizado en la provincia de Pinar del Río obtuvo resultados similares, aunque con una muestra mayor.5
CONCLUSIONES
En nuestro estudio predominó la edad de 65 a 69 años y el estado civil casado. La mayor cantidad de los gerontes estudiados mantenía relaciones sexuales activas, con privacidad y con una frecuencia quincenal. Las opiniones acerca de las relaciones sexuales fueron diversas, sin embargo, el mayor número de ancianos manifestó sentir placer con las mismas.
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6. Bravo Hernández N, Hernández Fernández H, Durand Cajigal L, Hernández Mayor A. La vida sexual en el adulto mayor. Rev Inf Científica. [revista en la Internet]. 2011 [citado 2016 Feb 22] ; 70(2). Disponible en: http://www.gtm.sld.cu/sitios/cpicm/contenido/ric/textos/Vol_70_No.2/vida_sexual_adulto_mayor_rb.pdf
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13. álvarez Vázquez L, Rodríguez Cabrera A, Salomón Avich O. Salud sexual y envejecimiento. [Internet]. [citado 20 Oct 2008] :[aprox.2p.]. Disponible en: http://bvs.sld.cu/revistas/spu/vol34-1-08/Word/spu.10108.doc
Anexo
Encuesta
El Departamento de Postgrado de la Filial de Ciencias Médicas de nuestro municipio, se encuentra realizando una investigación sobre sexualidad en el adulto mayor que asiste a la Universidad “Jesús Montané Oropesa”.
Los datos que solicitamos a continuación son totalmente anónimos para uso de la investigación, le agradecemos su sinceridad y colaboración.
1. Estado civil.
Casado_____
Divorciado____
Viudo______
Soltero_____
Pareja estable_____
2. Tiene su habitación propia (privacidad).
Sí____
No____
3. Mantiene relaciones sexuales.
Sí____
No____
4. Frecuencia de las actividades sexuales.
Semanal______
Quincenal_____
Mensual_____
Ocasionales____
5. Opiniones acerca de las relaciones sexuales
Deben cesar al avanzar la edad _____
Son innecesarias______
Son inadecuadas a esa edad _____
Son placenteras ______